sábado, 14 de marzo de 2015

Aviso

¡Hola! Queríamos avisarles que gracias a todas por pasarse en nuestra novela, comentar y votar. No sabéis la ilusión que nos da y las sonrisas que nos saca leer algunos de vuestros comentarios. 
Queríamos decirle que a partir del capítulo ocho, los capítulos serán narradas por algunos de los chicos o por algunas de las chicas. 
Osea, que la novela estará narrada en primera persona.

De nuevo, muchas gracias a todas las que dedican un ratito de su tiempo en leernos y nada. ¡Disfrutad de la novela! 

Cap. 7- La banda

¿Dónde se habrá metido este chico?, pensó Alex que no encontraba a su querido amigo Zayn. La chica cogió sus libros de la taquilla y la cerró, se dirigió a la clase de literatura que le esperaba a primera hora de la mañana.
Al llegar a su mesa de siempre, se percató que un par de ojos la miraban. Y estos pares correspondía de Alyson y su querida prima Clary.
Alessandra se aferró aún más a su libro. Que dos chicas le mirasen así la ponían de los nervios, ¿a quién no?
-¡Hola!- se atrevió a decir Alyson. Que llevaba ya un rato meditando en decir algo o no. Su prima antes le había dicho que se acercara a Alex, que se veía buena chica.
-Hola.- y ahí estaba la tímida voz de Alex, que raramente Aly escuchaba. 
-¿Te apetece venir esta tarde a mi casa?
Alexandra se quedó mirando un rato a la castaña y a la peliroja, respectivamente. ¿Y ahora ella que decía? Ninguna chica de su clase le había invitado a su casa. ¿Y si solo era para reírse de ella? Eso era algo que Alex no iba a permitir, que la tomaran por tonta.

-Digo, vamos a estar Clary,- señaló a la pelirroja-, Jodie y ya está.
-Bueno, también se vendrá Bonnie.- habló ahora Clary.
-Bueno, creo que no tengo nada que hacer esta tarde.- cerró su libro.- Sí, iré.
Las dos chicas le dedican una sonrisa y vuelven a mirar hacia delante. El profesor de literatura entró en la clase y así hasta que por fin, el aburrido señor dio por finalizada la hora. Alex recogió sus cosas y salió por la puerta , cuando unos brazos la atraparon. 
-¿A dónde vas? Vente con nosotras.- le dijo Clary.
-Me está esperando ahora mismo Liam, tengo que ir con él- se deshizo del agarre de Clary.-¡Luego os alcanzo!
-¡Está bien! Dile a Liam que se venga también.
Alex le alzó el pulgar y corrió hasta el lugar donde su mejor amigo la estaba esperando.
-¿Eres idiota o te haces?.
-¿Qué? ¿Por qué?
-El gilipollas de Liam está enamorado de mí y seguro que no me dejará en paz en todo el rato. Así que yo no voy a ir contigo.
-Venga ya, Aly. No creo que esté enamorado de tí. Y sí vas a venir, no seas aburrida.- Clary, que no sabía nada de la historia entre Liam y Aly, intentó convencer a su prima.
-No, es que tú no lo entiendes.- Clary la miró esperando una respuesta por parte de ésta.- Haber, el chico este, Liam, se lió conmigo el trimestre pasado. Y por ahí dicen que desde ese día está coladito por mí. Pero que no me lo dice porque sabe perfectamente que conmigo no va a pasar nada.
-¡Eso son puros rumores, tonta! ¿Y si está enamorado de tí, qué problema habría?
-Ninguno, per me siento incómoda estándo a su lado.- Clary alzó una ceja. La verdad es que no estaba entendiendo a su prima para nada.- Haber, es que es el primer chico que después de estar conmigo me importa, ¿sabes? No sé, es un sentimiento raro. 
-¿No será que quieres pasar muuuchas noches con él? ¿Y estar con él siempre?- preguntó Clary, que ya estaba empezando a entender a su prima.
-¿No querrás decir que me gusta, no?
-Ajá.
-¡Estás loca! ¡Nada que ver! Ya sabes lo que pienso yo de las relaciones.- y dicho eso, se colocó mejor los libros y ando hasta llegar al hueco de las escaleras, donde se encontraba Louis, Niall y Harry.

Ay, ¿cuándo se iba a dar cuenta de que le gusta muchísimo Liam?
Clary negó con la cabeza y se dirigió donde estaba su prima.
(...)
-¿Qué te traes con la nueva y Aly?
-Me han invitado esta tarde a ir a su casa.
-¿Vas a ir?
-Sí.
-¿Y qué va a pasar con el ensayo que teníamos pensado esta tarde?
-¿Qué ensayo?.- Liam le dio un pequeño golpe en la frente de Alex.
-¡El de la banda! Le prometimos a Zayn que iríamos a mi casa esta tarde para ensayar. El próximo viernes tenemos una presentación y no podemos faltar.
-¡Oh, mierda! Lo había olvidado.- Liam rodó los ojos mientras se cruzaba de brazos.- ¿Y si les digo que se vengan al ensayo? No sé, así nos conocemos todos un poco. 
-¿Va a estar Aly?- preguntó mientras se le notaban rojas las mejillas.
-Sí, supongo que sí. ¡Voy a contarles, avisa tú a Zayn!- se despidió de Liam con un abrazo y un beso en la mejilla.
Desde hace unos meses, Zayn, Liam y Alex habían pensado en formar una banda. Liam era el guitarrista, Zayn el batería y Alex era la que ponía la voz a las maravillas de canciones que componían juntos. Desde hace tiempo estaban buscando nuevos integrantes para su banda, ya que para la presentación que tenían el próximo Viernes, necesitaban una banda con seis integrantes. Y ahora mismo solo eran tres. 
 (...)
Aly se paró en el hueco de la escalera donde están Niall, Harry y Louis. Aún no se podía creer el momento que habían tenido Harry y su prima esta mañana. ¿Quién iba a decir que estos dos acabarían en una ducha juntos?
-Ey-saludó Aly con la mano al llegar hasta los chicos- ¿qué es de vosotros? Hoy no habéis entrado a clase.- dijo la castaña sacando tema de conversación.
 -No teníamos ganas de ver la cara de culo que tiene el señor Sharman.-contestó Louis sin quitar la vista de su móvil.
-Tampoco es que os hayais perdido mucho, lo mismo de siempre.-respondió Aly. 
Al decir esto, detrás de la chica castaña apareció una cabezilla pelirroja. 
-¡Zanahoria!- esta vez, Louis si que apartó la cabeza de su móvil y se levantó a abrazar a su nueva amiga: Clary. Bajo la mirada atenta de Harry.
La verdad es que éste tenía una cara en este momento...
-Oye, Clary, tengo que hablar contigo.- dijo Niall mordiéndose una uña. Señal de que estaba nervioso. 
-¿Sobre qué?- dijo Harry interponiéndose en la conversación.
-Harry, ¿y a ti que más te da?.- esto a Harry le sentó como una patada en el culo. 
Con lo bien que se la había pasado esta mañana, bueno. Siempre que sea molestar a Clary se lo iba a pasar bien. Pero ya le estaba tocando un poco los huevines que sus mejores amigos se tomaran tantas confianzas con SU hermana. Bueno, tal vez Harry en este momento si que esté un poquito celoso, pero no porque le gustase Clary, no, no. Sino porque Clary había venido a su familia, quitándole a sus amigos y todo lo que tenía que ver con Harry. 
¿O era porque le gustaba y le molestaba la idea de que pudiese estar con uno de sus mejores amigos?
Clary, entrelazó su mano con la de Niall. Y subieron por la escalera hasta llegar al laboratorio, que esta aula siempre solía estar vacía. 
-¿Y bien?-preguntó Clary impaciente.
-Bueno, nada.. que..- las mejillas de Niall ya se tornaron de un color más rojizo. 
-¿Qué?- le estaba poniendo muy neviosa y encima que Niall no le contestase le hacía ponerse aún más.
Niall se acercó a la pelirroja, utilizó su mano para acariciar la sien de la chica y la otra la apoya contra la pared impidiendo que Clary se mueva. Ésta se quedó con su espalda pegada a la pared y sin poder moverse ya que tenía delante a Niall que cada vez se acercaba más a su boca. Clary no sabía que hacer, ¿cómo salir de ahí? 
-Esto, Niall...- carraspeó la chica, poniéndo sus manos en lo alto de los pectorales del chico.
-¡Perdón, perdón, perdón!.- repetía el chico mientras se separaba de Clary. Ésta se acercó hasta él y le tocó el hombro con su mano.
-No pasa nada Niall.- le dedicó una sonrisa y el chico se la devolvió encantada.-¿Qué era lo que me tenías que decir?
-Bueno...- se acarició el cabello.- Me preguntaba si te gustaría venir conmigo mañana a la tarde. Pero que si no quieres, no te preocupes...
-Niall.
-...Que no  pasa nada, eh. Que es normal que no quieras venir conmigo, ya que apenas nos conocemos y tal...
-¡Niall!
-¿Qué?
-Que iré mañana contigo encantada.
La verdad es que le apetecía estar un rato con el chico. Se ha portado muy bien con ella desde que llegó. Y, ¿quién sabe? A lo mejor hasta le empieza  a gustar el chico. 
Seguro que se lo pasará genial con él.
(...)
 -¿No están tardando mucho?- Harry, que no puede evitar lo impaciente que está, porque aquella pelirroja apareciera. 
- ¿Y a ti que más te da? Acaso.. ¿te gusta?- suelta Alyson tan cortante como ella suele ser. 
-Tu estás chiflada.
-Parece que te gusta.- habló Jodie que acababa de llegar. 
-Ella no querría nada con él.- dice Louis. 
-¿Qué no? Si yo quisiera ya la tendría en el bote. 
-Estás muy confundido.- añade Alyson con una carcajada.
-Me estan esperando, adiós.- Harry, que ignora las palabras de Alyson, se desvanece mientras sube las escaleras.
Éste, que va de camino al laboratorio, se cruza con Clary que no para de reírse con Niall. Clary y él intercambian unas miradas. Aunque no lo reconozca le molesta muchísmo que Clary y Niall se lleven tan bien. El chico siguió su camino maldiciendo en voz baja el día en que se conocieron Niall y Clary. 
Harry no puede evitar una pequeña sonrisa pensando en la perfecta ducha que se había dado esa misma mañana, aunque Clary no le haya besado, se lo ha pasado bastante bien.

Sólo es una niñata no me puede gustar, además no es mi prototipo. Repite harry en su cabeza al darse cuenta que acababa de sonréir al a recordar aquella chica pelirroja.
(..)
-¡Venga Zayn, que no pasa nada!- insiste la morena. 
-¡Que no, que no y que no! No me caen bien, y no me apetece ensayar con ellas mirando.- dice Zayn, que hoy está insoportable. 
 -Joder, tu puedes traer a esa choni, ¿como se llama? ¿Sam? y ¿Alex no puede invitar a Clary y Alyson?- dice Liam, que está ya un poco harto de la actitud de su amigo. 
-Soís unos pesados, vale que vengan, y esto lo hago por ti, porque sé que estás coladito por esa tía y porque están buenas.- Ay, Zayn tan superficial como siempre. 
-Muy bien, pues a las cinco en tu casa.- dice Alex, refiriéndose a la casa de Liam. 

lunes, 2 de marzo de 2015

Cap. 6- Una ducha de lo más entretenida.

-Alex, enserio, no te enfades.
-¿¡Qué no me enfade!?- pasó su mano por su flequillo, echándoselo hacia atrás.- ¡Acabas de tomar una pastilla! ¿¡Estás loco o qué!? ¿Qué es que ahora te va a ese rollo o cómo? ¡Porque no lo entiendo!
Unos minutos después de estar en casa de Alex, Zayn decidió ir a una discoteca. Y, como siempre, convenció a Alex de que fuera con él. Total, que al llegar a la discoteca. ¡Qué vaya discoteca! Alex perdió de vista a Zayn. Así que Alex se quedó bailando en la pista de baile hasta que su mejor amigo se dignara de aparecer. Unos cuantos minutos despues, Zayn apareció. Pero no iba solo, iba acompañado de unos tipos llenos de tatuajes y piercings. Alex estaba asustadísima, ella sabía que venir a estas horas de la mañana a una discoteca no era buena idea. Los tipos le ofrecieron una pastillita a la morena, que ésta, obviamente, se negó. Ya que sabía perfectamente de que se trataba. Total, que los tipos no insistieron con ella, y fueron a preguntarle a Zayn. Quien aceptó. 
-Alex, tú lo has dicho. ¡Ha sido una pastilla! No me va a hacer nada.- el moreno se acercó a su mejor amiga para darle un abrazo.
-No, Zayn, no.-se apartó de su amigo.- No me gusta esto. Vámonos a casa.
-¿Qué? ¿Estás loca?
Alex le miró con cara asesina. De verdad, ¿este chico estaba bien de la cabeza? 
-No pienso ir a ese infierno que tengo como casa. ¡Tú no tienes que aguantar a un padre alcóholico echándose la culpa siempre de la muerte de mamá!- volvió a hablar, bueno, más bien a gritar. 
-Pues vente a la mía entonces. ¡Pero vámonos, por favor! No aguanto a esta gente y menos este sitio.- le acarició la mejilla a Zayn.- Por favor, Zayn.- rogó por última vez y esta vez pareció convencer al chico. 
(...)
Clary llegó a casa y lo primero que hizo fue ir hacia su habitación. Eran las cuatro de la mañana y Grace y Tom ya estaban durmiendo. Llegó a su cuarto y lo primero que hizo fue tirarse en la cama y pensar en lo que acababa de pasar; ¿he besado a mi hermanastro? ¿En qué estabas pensando, Clary? ¿Me ha gustado? ¿Que pasará ahora? Y miles de preguntas más que rondaban por su cabeza. 
La chica se quedó dormida en cuestión de minutos. Recordando aquellos labios rosados y aquellos ojos verdes.
A la mañana siguiente, la madre de Clary abrió la puerta de su dormitorio y sigilosamente caminó hasta la cama. 
-Buenos días cariño.- susurró Grace, apartándole parte del pelo de la cara de Clary.
-Buenos días mamá.
Grace se acercó hasta su frente y la besó.
-Me voy a trabajar, despierta a Harry, os he dejado el desayuno en la mesa.- dijo su madre dispuesta a salir del cuarto.  
-¿Qué? No, no, no.- se levantó de la cama la chica.- Despiértalo tú, por favor mamá. No le caigo bien y seguramente me va a insultar o no se qué.
-Cariño, no tengo tiempo. ¡Y no te odia, no seas tonta!- esta vez si que salió por la puerta.- ¡Te quiero!
Así que, quiere que despierte a Harry. Bien, vamos a despertarlo, pensó Clary. Dispuesta a hacer lo que estaba pensando.
Clary se dirigió al baño y se recoge su pelo en una coleta y baja hasta abajo a coger un vaso. Vuelve arriba y lo llena de agua. Con cuidado de no derramar nada al suelo, se dirige al cuarto de Harry. 
Clary se percató de que pegada a una pared, debajo de una gran ventana, había una cama con sábanas negras, y sobre estas, descansaba un chico boca arriba, con muchos tatuajes, y solo unos calzoncillos grises claros.
Clary apartó rápidamente la mirada, no quería ver bultos indebidos.
Aunque ella debía reconocer que la milésima de segundo que vio el cuerpo de Harry, pensó que tenía un buen parecer, que aquel chico no estaba mal y se cuidaba.
Y ahora es cuando se dio cuenta de que, a lo mejor, Harry era simpático y que tenía su lado bueno el que ella estaría dispuesta a conocer, sobre todo despues del beso...¿¡Pero qué mierdas estaba diciendo!?
Harry seguía siendo el mismo gilipollas de siempre, ni lado bueno ni penes. 
Con cuidado, la chica se acercó más al chico, que dormía plácidamente. Alzó el vaso de agua y lo arrojó hacia la cara de Harry empapando todo lo que llevaba a su paso.
A Harry poco  tardó en reaccionar. Se giró rápidamente viendo a la culpable y corrió hacia ella. 
Esta vez si que la había cagado Clary. 
La cogió como si fuera un saco de patatas y la llevó hasta el cuarto de baño.
-¡Buenos días Harry! Me encanta la mariposa que tienes tatuada, ¿me bajas por favor?- rogó la chica pataleando. Harry le hizo caso omiso.-¡No, Harry, por favor! No, la ducha no. ¡Por favor! ¡Harry!
-No.- contestó fríamente y la depositó en el plato de la ducha. 
Cogió la alcachofa de la ducha, dispuesto a echar agua.
-Harry, venga ya. Que no ha sido para tanto.
-Me da igual.
Abrió el grifo y empezó a mojar a Clary de arriba abajo. 
-¿Sabes una cosa?- preguntó Clary echándose el pelo hacia atrás.
-Dime princesa.
-Lo primero: te odio y lo segundo: no vuelvas a decírme princesa. 
-El sentimiento es mutuo, princesa.- dijo el chico remarcando la palabra princesa.
Esto hizo cabrear aún más a Clary. 
-Ala, a mojarte tú también.
Clary agarró de los hombros a Harry y tiró de él, haciendo que se metiese entero en la ducha. Hábilmente le arrebató la alcachofa de las manos y le amenazó con ella al  chico, poniéndosela delante de la cara.
-Estoy mojado. Me da igual.
La chica gruñó y manipuló los mandos de la ducha, haciendo que ésta saliera fría. 
-Joder, Clary, está muy fría- Harry empezó a pegar pequeños salititos y Clary no podía reírse más de lo patético y ridículo que se veía Harry.
Volvió a manipular los mandos y lo puso en agua templada. 
El agua caía entre ellos dos. Se entretuvo unos segundos mirando a la chica. El pelo largo y pelirrojo recogido en una coleta, teñido a más oscuro por el agua, descendía mojado por su cuerpo. La camiseta del pijama, de color rosa, se pegaba a su cuerpo y dejaba ver ciertas transparencias, haciendo que el sujetador negro de la chica quedase al alcance de la vista. Un pantalón corto, también empapado, de color granate, daba paso a unas largas y morenas piernas, que acababan en unos delicados pies. 
Ay, si hubiese sido otra chica, Harry no se lo habría pensado más veces y se la hubiera tirado en este mismo momento. 
-¿Qué miras idiota?
Lo bonita que te ves así, ¿pero qué diablos estabas diciendo Harry? Recuerda que es la inaguantable de Clary y que tú la odias, se dijo para sí mismo Harry.
-Lo que no tienes.
-Así y, ¿qué no tengo, eh?- la chica se acercó a Harry, peligrosamente. 
Ahora Harry si que no sabía que contestar. Tenía muy cerca a Clary y se estaba poniendo muy nervioso. Harry la agarró de la cintura y la acercó más a él. El agua seguía cayendo entre ellos. Y Clary aún seguía con la alcachofa en sus manos. En un movimiento, Clary alzó el brazo y le lanzó un buen chorro a Harry. Éste la soltó de inmediato.
Ahora sí que estaba cabreado con ella, y pensaba que estaba bonita.
Que bonita ni que mierdas. 
-¿Qué haces?- preguntó la chica intentando salir.
-Oh no, pelirroja, tú no sales de aquí hasta que yo me de una ducha.
-¿Estarás de coña no?- Harry comenzó a bajarse sus calzoncillos. Menos mal que la chica ya se había girado.
-Puedes girarte, eh princesa.
-Y dale con ese estúpido mote.
-Venga, si se que te pongo
-A mi lo único que me pones es....es....¡enferma!- se giró hasta Harry dándole la cara y corriendo se tapó la cara con las manos.- ¡Harry, por favor, déjame salir!
-Tranquila, nena, que por mi te puedes girar. ¡Me encanta estar como vine al mundo!- sonrió.
-Te odio, mucho. Que lo sepas.
El chico abrió el bote de gel y se lo restregó por el cuerpo.  
-¿Por qué no te duchas, cielo?
-No te acerques a mí, bicho.
El chico soltó una carcajada. Clary se quería morir en este momento. Menos mal que la ducha era más o menos grandecita. 
Pocos minutos pasaron, que para Clary le habían parecido horas, y Harry por fin abrió la puerta de la ducha y salió. 
-Ya puedes abrir los ojos pelirroja.
-¿Pordías solamente llamarme por mi nombre nada más?-preguntó mientras salía de la ducha y se deshacía la coleta.
-Me da que no.- sonrió ampliamente Harry. 
Menudo gilipollas estaba echo... Y pensar que a lo mejor se podrían llevar mejor después de lo del beso de anoche. Segurmente ni Harry se acordará. 
-Toma y sécate un poco, princesa. No queremos que mojes todo el pasillo.
La chica gruñó y agarró la toalla y después Harry, frenó a la chica cogiéndola de la mano y tirando de ella. Después, enroscó la toalla en su cintura de forma que quedaba acorralada entre el cuerpo de Harry y la toalla.
-No se me ha olvidado lo de ayer.
-¿Qué paso ayer?- se hizo la tonta Clary. No tenía pensamientos de hablar esto ahora con Harry.
-Esto.
El chico la atrajo más a ella y la agarró de la cabeza. La miró a los ojos y la volvió a besar como anoche. Aunque esta vez, Clary no se dejó.
Por supuesto que no se iba a dejar.
-¡Eres un baboso, Harry!- le dio un manotazo en el hombro.- Déjame en paz, joder.
El chico, que no había pasado más verguenza en su vida, soltó a la chica y ésta, gruñendo y con las mejillas al rojo vivo, salió del cuarto de baño. Con el pulso acelarado se dirigió hasta su cuarto y se quitó su pijama todo empapado. 
Madre mía, ¡la había vuelto a besar!
(...)
Alyson se encontraba cepillándose su pelo. Si no se daba prisa llegaría tarde al instituto. Cosa que no le convenía, ya que con sus bajas notas no se podía permitir llegar tarde.
-¡Aly, cielo, venga!
-Ya voy papá.
La castaña se miró por última vez en el espeo. Había sido buena idea lo de ponerse pantalones cortos. Ya que, raramente, salía el sol en Holmes Chapel. Cogió su sombrero y así, más feliz que una perdiz, bajó las escaleras de dos en dos. 
En el salón estaba su padre con el periódico y su taza de café. Su madre seguramente ya se habría ido al restaurante donde trabaja. 
-Me voy ya papá. ¡Buena suerte en el trabajo!.
-Siempre la tengo, cariño.- Alyson se acercó a su padre y le besó la mejilla.
Ay, si supieran que su hija no es tan buenecita como parece ser. 
La chica salió por la puerta y se puso los cascos, llegó al instituto mientras escuchaba Imagine Dragons, más concretamente Dream.
-¡Alyson!- se escuchó la voz de Jodie por detrás. Aly se quitó las cascos y se giró a ver a su amiga. Que tenía unas ojeras que vamos. Pero vaya igual que Aly. Ya que irse un martes a una fiesta por la noche, no era muy buena idea.  
-Buenos días, tienes una cara de culo. ¿Cómo fue anoche con Louis?- se burló Alyson que sabe que su amiga esta coladita por ese chico y no lo quiere admitir. 

-Imbécil, ¿y a ti con el castaño?- le sacó la lengua Jodie. 
-¿Qué castaño, ni castaño?
-Sabes a quién me refiero.- contestó Jodie mientras soltaba una carcajada. 
-¿Quién?- Alyson, que sabe perfectamente de la persona a la que se refiere su amiga tiene nombre y apellidos: Liam Payne. El chico que anda siempre callado y con el grupito de Alex y Zayn. La verdad es que Alyson lo ve bastante atractivo, pero nada más. Además si tuviera la oportunidad de estar con él, lo único que haría sería tirárselo. Sí, sí, ya que Aly no le gusta estar atada a alguien. No le gusta tener a alguien que esté todo el día pendiente de ella. 
-Eres idiota. Creo que beber tanto alcohol y después venir al instituto te ha matado la única neurona que tienes rondando por ahí.- Jodie abrazó a su amiga de lado y continuaron andando hasta llegar a la puerta del instituto.
-Sabía perfectamente a quien te referías, idiota.-continuaron andando hasta llegar a sus taquillas.
-Pues entonces contéstame ahora. 
-¡Que pesada eres! Que no me gusta. 
-Ya, ya. No me lo creo.- Aly rodó los ojos. No serviría de nada contestar a su amiga. Ya que ésta iba a seguir diciendo lo mismo.- Hablando del rey de roma, por ahí viene.
Liam pasó junto con Zayn. Zayn, como siempre, contándole sus más aventuras sexuales con alguna chica. Liam, como siempre, pasándo un poco de él. Ya que se las conocía todas. 
Alyson no pudo apartar los ojos del chico. La verdad es que si que estaba realmente bien. Y Jodie se dio cuenta de esto. No había más que decir. Jodie sabía, perfectamente, que Liam está enamorado de su mejor amiga. Y que Alyson, pues, también le gustaba. Tampoco decir que estaba enamorada. Y entonces, Jodie pensó en algo. Iba a hacer algo para juntar a estos dos. 

domingo, 1 de marzo de 2015

Cap. 5- ¿Verdad o desafío?

Bonnie al leer el mensaje de su hermano no tardó ni un segundo en poner rumbo a la discoteca. Tardó unos veinte minutos en llegar. 
Bonnie divisó a un amigo de su hermano y corrió hasta él. 
-¿Dónde está mi hermano?- preguntó la castaña a un amigo de su hermano: Jace. 
-Hola, Bonnie. 
El chico ya tenía las mejillas rojas. Y se estaba poniendo nervioso al tener a Bonnie delante suya.
-Creo que está en los baños.
-¿Cómo que está en el baño? ¿¡Con quién!?- la joven se estaba poniendo histérica y no le ayudaba que Jace se mantuviera callado. 
La muchacha se dirigió histérica al baño, cuando chocó con Clary.
-Perdona.
-Perdonada estás- las dos chicas se quedaron unos segundos en silencio- ¿Te conozco? Me suenas mucho.- Sonrió la pelirroja.
-Sí, nos hemos visto por el instituto- le dedicó una sonrisa.- Soy Bonnie. Segundo año-
-Clary, primer año- se presentaron las dos- ¿A quién buscabas?
-A mi hermano. Un amigo suyo me dijo que se fue al baño y estaba apunto de entrar.
-¿Tú hermano? ¿No será Peter, no?- Bonnie la miró extrañada y asintió con la cabeza.- ¡Estaba hace unos minutos con él! Iba con una chica para el baño.
 -Madre mia, ¡este niño me va a volver loca!- alzó las manos y caminó hasta el baño dejando a Clary más que confundida. 

Bonnie tras atravesar por toda aquella gente borracha, al fin llegó al baño. Supuso que Peter estaría en el baño de los chicos, pero ¿y si entraba y se encontraba a su hermano dándole al tema? La cara de la chica cambió en cuestión de segundos. La idea de ver a su hermano liándose con una tía no le agradaba. La castaña sacudió la cabeza y abrió la puerta del baño. Cuando iba a entrar,  alguien le agarró del brazo. Bonnie, asustada, se dio la vuelta y se encontró con un castaño de ojos azules. No podía parar de mirar esos ojos radiantes. 
-¿Entras en el baño de los chicos?- el chico, que ya se le notaba a km de que había bebido, le sonrió a la joven. 
- Emm.. bueno.., yo.. yo solo estaba.. buscando a mi hermano.- Bonnie ya se estaba poniendo nerviosa. No le gustaba estar hablando con un chico borracho y lleno de tatuajes. Su madre siempre le había dicho que la gente que llevara tatuajes, no era buena compañía. 
- Soy Louis, Louis Tomlinson. 
-Bonnie.- el chico sonrió aún más viéndola de arriba abajo- M-me tengo que ir. 
El tal Louis Tomlinson la agarró del brazo. 

-¿Irte? Si es temprano. No seas aburrida.- Louis la acercó hasta ella y comenzó a besarle el cuello. Ahora mismo Bonnie estaba muerta del asco. Su hermano ahora mismo estará con una chica, a ella le estaba acosando un borracho y, para colmo, le había prometido a su madre llegar para la cena. ¿Qué más le podía pasar?
-No tengo nada que hacer que aquí, vengo a por mi hermano y ahora pasa de mi culo.- la chica se separó, bruscamente, del agarre de Louis. Estaba furiosa, muy furiosa. 
-Podrías venir, y divertirte conmigo. 
 -No te conozco, además estás borracho.- Bonnie miró para todos lados, haber si veía aquella chica pelirroja que hace unos minutos había conocido y así poder salvarle del tío este. 
 -No sabes lo que te estas perdiendo.- Louis se mordió el labio y metió su mano en su bolsillo. Sacando de ahí una cajetilla de tabaco. Se lo enciende y al darle la primera calada le echa el humo en la cara de Bonnie. Ésta estaba más que furiosa. 
Sabía que venir a una discoteca entre semana no era buena idea.
-Vamos a jugar un juego.- la ronca voz del chico hizo estremecer a Bonnie. Tenía que admitir que el chico estaba como un tren. 
-N-no me apetece.
-Sí, ven conmigo. Necesitamos a chicas.
-¿Necesitamos? ¿Quienes?- el chico ni la contestó, ya estaba cogiéndole de la mano y llevándola hasta un grupo de amigos. 
Bonnie no se podía soltar de su agarre y no le quedó más remedio que seguir al chico. 
(...)
-Peter, ¿eres virgen?
Peter estaba en un mini cuarto de baño con una chica que apenas conocía pero sabía que estaba en su instituto, ya que le sonaba mucho su cara. 
-No.- mentira. Peter seguía siendo virgen, pero él se había propuesto a que hoy, esta misma noche, se iba a convertir en un hombre. En un hombre de verdad. 
-¡Venga ya, Peter! Ni si quiera sabes abrir un condón- la chica ya se estaba poniendo la camiseta, que anteriormente se la había quitado el moreno.
Sin decir una sola palabra más, la chica salió del baño, dejando a Peter solo y con el sonido de dos chicos dándole al tema. 

(...)
Jodie estaba bailando con un chico bastante mono. Estaban demasiado cerca y Jodie ya pudo notar el pequeño bulto que se le notaba al chico. Le encantaba la reacción que le podía causar a los chicos. 
Antes, Alyson le había dicho que se fuera con ella que iba a jugar con los chicos a un juego o no sé que. Jodie, sabía que iba a estar Tomlinson y no le agrababa la idea de verle dándose el lote con otra tía que no fuera ella. Wow, sí que le estaba gustando Louis. 
-¿Por qué no vamos a mi coche?- preguntó el chico deseándo que Jodie aceptara su propuesta.
Pero para sorpresa de los dos, Jodie dijo que no. Era la primera vez que rechazaba a un chico, ya que ella era adicta a los rollos de una noche. 
Soltó al chico y se dirigió hasta el lugar donde le había dicho su mejor amiga que iban a estar.
No iba a dejar que alguna zorra se besuqueara con SU Louis. 
(...)
  En un lugar apartado de todo el ambiente de la discoteca, se encontraban cuatro chicos y tres chicas sentados en corro. Esperando a que alguna chica apareciera. 
-Vamos a empezar ya, me aburro...- dijo una chica con el pelo azul, que no paraba de mascar un chicle.
-Falta una chica.- dijo Niall. 
-Ya no falta ninguna.- apareció Jodie mirando hacia el asiento de Louis, que por suerte la suya, al lado de él no había nadie. Se sentó rapidamente en el pequeño sillón rojo. 
-¿Y a qué vamos a jugar?- preguntó interesada Clary. 
-Tú no vas a jugar.- Harry, que se había mantenido todo el rato callado, miró a Clary seriamente. 
-¿Y porqué no?
-Porque no quiero.
-¿Y desde cuándo tengo que hacer lo que tú quieras?- alzó la voz la pelirroja. Harry la volvió mirar.
- ¿A qué vamos a jugar Niall?- Clary ignoró completamente a Harry.
-Verdad o desafio.- contestó Niall. 
-Empiezo yo.- dijo la chica de pelo azul, que se llama Sam, muy animada. 
-¿Verdad o desafío?- preguntó Jodie. 
-Desafío.
Todos los demás se miraron entre ellos. Ya sabían lo que quería Sam: liarse con Harry. 
-Atrévete a quitárte la camiseta y no ponértela en todo lo que queda de juego.- habló Clary. Sabía la intenciones que tenía con Harry. 
-¿Qué eres un bebé? Eso lo hace cualquiera.- contestó borde Sam a la chica. Harry sonrió mostrando los dientes y eso no le pudo sentar más mal a Clary. 
-Venga, Sam, haz lo que te han dicho.- dijo Niall tranquilamente. 
Sam refunfuñó y no le quedó más remedio que quitarse la camiseta. Tras un par de silbidos por parte de los chicos y unas cuantas miradas de asco por parte de las chicas, le tocaba el turno a otra persona. 
-Me toca.- Alyson se acercó más al corro que habían formado- Eligo verdad.
-Mm, ¿es verdad que te acostates con Payne?- preguntó Jodie sabiendo ya la respuesta.
-¡Si ya la sabes, guarra!- le dio un pequeño golpe a su mejor amiga en el hombro. 
-Lo sabrás tú, pero nosotros no, así que cuenta- dijo Harry interesado. 
-Sí.- dijo en un susurro.
Todos soltaron un aw y comenzaron a reírse. Como casi todos los chicos que se acuestan con Alyson, se quedan enamorados. Esperando a que más tarde les volvieran a hablar. Cosa que eso nunca iba a suceder. 
-Ahora voy yo. -Dice Harry interrumpiendo las risas.
-¿Verdad o desafío?- preguntó Sam que no paraba de mirar a Harry.
-Desafío. 
-Le tienes que dar un beso a alguna chica de aqui.- desafió Louis a su mejor amigo. 
-¿Qué? No.- contestó Harry ante esta propuesta. 
-¡Uuuh! El valiente de Harry no puede.-se burló Alyson acompañada de unas risitas por parte de Jodie y Louis. 
Harry observó a cada una de las chicas que habían. Alyson, obviamente no le iba a besar, sería incapaz. Harry a Alyson la ve como una hermana. La descartó y fijó su mirada en Jodie. Tampoco la iba a besar, se moriría del asco. Haber, no es que Harry le tenga asco a la chica, solo que no se imagina dándole un beso. Sam, esta si que no. La muy pesada lleva tirándole los tejos desde que comenzó la noche y no le iba a dar el gusto. Y además de solo verla masticándo ese chicle... 
La última que quedaba era Clary. 
El chico sin saber muy bien si estaba apunto de hacer, se acercó a Clary.
Clary se quedó perpleja ante aquella situación. ¿De verdad la iba a besar?
Estos se quedaron mirando un rato como si nada más importara. Las mejillas de Clary ya se tornaron de un color más rojo. Estaba nerviosa, Harry se acercó un poco más. El pecho de Clary comenzaba a bajar y subir rápidamante y sentía como si sus mejillas fueran a estallar en cualquier momento. Ahora mismo no le importaba nada más. Le daba igual quien estuviera viéndolos, sólo estaban ellos dos.  Harry le apartó el pelo y se lo colocó detrás de su oreja. Le acarició la mejilla y la acercó hasta ella. Estaban a milímetros. No se lo pensó dos veces y juntó sus labios con los de Clary. 
La pelirroja le dejó paso y sus lenguas ya se movían al compás. Clary se acercó aún más a Harry, si eso era posible. Harry soltó un pequeño gemido que provocó que el beso de éstos subiera más el tono. 
Clary mordió el labio inferior de Harry lo que provocó otro gemido más a Harry. Clary pensó que ese era el sonido más bonito y más excitante que había escuchado nunca.
-¡Wow, irse al cuarto de baño!- la voz de Jodie hizo separlos de golpe.
¿Qué coño acaba de pasar aquí?, pensó la pelirroja.
-Y-yo, me tengo que ir.- Clary se levantó de su sitio y se dirigió hasta la salida de la discoteca. Necesitaba pensar claramente y analizar lo que acaba de hacer.
¡Había besado a Harry! 
Se tocó los labios y una sonrisa apareció en su rostro.
No, no, no. ¡Esto no estaba bien! Se supone que Clary odia a Harry. Y él la odia a ella.